Skip to main content

Mi historia y lo que me llevó a descubrir
otra forma de liderar mi negocio

Sobre mi ana curiel diaz

Hace algunos años empecé a cuestionarme...

No es casualidad que estés leyendo esto.

Aquí y ahora.

En esencia era pura energía femenina

Siempre fui una niña creativa, sensible y con una gran capacidad para percibir lo que otros no veían. Mi esencia era pura energía femenina: intuitiva, soñadora y llena de imaginación. Me sentía cómoda en ese mundo de fluir y crear sin prisa pero, con el tiempo, aprendí que eso no era suficiente. Parecía que para encajar y ser valorada tenía que demostrar, esforzarme más, ser la mejor. Y así, fui dejando atrás esa parte de mí y me anclé a la autoexigencia, la rigidez y el control, entrando de lleno en una energía masculina constante de hacer, empujar y lograr mis objetivos a toda costa.

En esa vorágine de «hacer para merecer», me volví eficiente, resolutiva y capaz de conseguir cualquier cosa que me propusiera. Los resultados llegaban, sí, pero cada logro me dejaba cansada y vacía. Comencé a vivir desconectada de lo que realmente deseaba, adaptándome a lo que creía que el mundo esperaba de mí. Me acostumbré a dar en exceso hacia afuera, a buscar siempre la validación externa y a ignorar mis propias necesidades, creyendo que esa era la única forma de avanzar. 

…pero me fui al extremo, de mi energía masculina

Lo que nadie me enseñó eran las consecuencias de irme al extremo de mi energía masculina. Me sentía agotada, desbordada, atrapada en un ciclo donde cada éxito solo significaba un nuevo nivel de exigencia. Hasta que me di cuenta que no podía seguir por ese camino, porque no era sostenible ni saludable a largo plazo. Y llegó el momento de tomar una decisión para cambiar porque sentía la necesidad urgente de reconectar conmigo misma, con esa esencia femenina que había dejado de lado, y fue en ese proceso de autodescubrimiento donde todo cambió.

Aprendí que liderar no es solo empujar, controlar y cumplir objetivos sin descanso. Descubrí que la verdadera fuerza está en saber cuándo avanzar y cuándo parar, cuándo actuar y cuándo permitirte simplemente sentir. Entender esto no fue sencillo, porque me había acostumbrado a medir mi valor en función de lo que hacía. Pero poco a poco, recuperé el equilibrio. Integré ambas energías —masculina y femenina— en mi vida y en mi negocio, y lo más sorprendente fue que, cuanto más conectaba conmigo misma, mejores resultados obtenía en mi negocio, sin agotarme.

Hoy, lidero mi negocio desde esa energía femenina que una vez dejé atrás, pero que ahora sé combinar con mi energía masculina de foco y acción. Y esa es la transformación que te acompaño a vivir. Si te sientes atrapada en esa rueda de exigencia constante, de empujar y hacer sin parar, quiero decirte que hay otra manera. No se trata de dejar de actuar ni de abandonar tus objetivos o soñar pequeño, sino de aprender a liderar desde un lugar más conectado contigo misma, donde el éxito no tenga que costarte tu bienestar.

Este camino además te permitirá disfrutar del proceso, liderar con claridad y, sobre todo, avanzar sin dejarte a ti misma atrás. 

Si buscas una nueva forma de liderazgo, este es tu espacio.

Cómo trabajar conmigo
anacuriell metodo

Soy Ana Curiel Díaz,

mentora de gestión emocional y energética, experta en energía femenina aplicada a negocios.

Mi misión es acompañarte a hacer crecer tu negocio, acelerándolo de 5 a 6 cifras mediante la gestión emocional y energética, integrando tu energía femenina para  que logres tus metas sin agotarte en el camino, alcanzando lo que llamo «éxito saludable”. 

Mi visión es transformar el sector de los negocios para que más empresarios se cuiden, disfruten y encuentren su equilibrio entre su vida personal y profesional. 

Si tú cambias, tu negocio también.